Una vez finalizadas las medidas de aislamiento preventivo, el país inicia un proceso de reactivación económica en el que los emprendedores deben enfrentar el reto de salir a los mercados para retomar su actividad. Algunos, en particular aquellos con capacidades de adaptación e innovación al comercio electrónico, han sufrido menos esta realidad; otros, relacionados con ciertos sectores como el turismo, bienes de lujo o aquellos en etapas tempranas se han visto afectados de manera importante. Los emprendedores en condición de pobreza, pobreza extrema y vulnerabilidad no son ajenos a esta realidad. Requieren herramientas de apoyo para adecuarse a las nuevas posibilidades. Frente a esta situación el Gobierno ha diseño varias iniciativas pensando en la reactivación económica, una de ellas es la estrategia Economía para la Gente.

De acuerdo con la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH), realizada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) en 2019, hay 5,9 millones de micronegocios. Aportan el 46,2% del empleo en el país. Algunas de las empresas que hacen parte de este segmento tienen hasta 9 empleados. En este universo, el 87,6% de los micronegocios son de trabajadores por cuenta propia y solo el 12,4% son de patronos o empleadores. El 34,8% constituyó el negocio porque no tiene otra alternativa de ingresos. Estas unidades productivas son claramente una de las principales oportunidades de generación de ingresos para la población más vulnerable”.

Economía para la Gente, a partir de la articulación de la oferta, pretende complementar y favorecer la concurrencia de acciones de las entidades y actores del Gobierno Nacional orientadas a impulsar el crecimiento, la consolidación, la reactivación y la sostenibilidad de unidades productivas en cinco ejes de acción:

1. Generación de ingresos, emprendimiento y formalización.
2. Desarrollo productivo, asociatividad y acceso a mercados.
3. Innovación y Tecnología.
4. Entorno competitivo.
5. Financiamiento.

Para Prosperidad Social ha sido importante pensar en iniciativas o acciones para la generación de ingresos sostenibles, en especial de su población. Esto impacta en la superación de la pobreza y la disminución de la desigualdad. Esta alianza con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo para avanzar de forma mancomunada y contribuir con la estrategia Economía para la Gente permitirá que durante 2020, 2021 y 2022 más de 580.000 micronegocios avancen en la consolidación, la reactivación económica y la formalización, aportando cerca de 1,7 billones de pesos.

Para un participante del programa Mi Negocio, por ejemplo, el tránsito por la ruta de atención de la estrategia puede representar pasar del ingreso y sensibilización a poner en marcha su idea de negocio, sostenerse en el tiempo, crecer y expandir su empresa. A través de Economía para la Gente se logra que el mismo participante se beneficie de programas como Núcleo E, el SENA e INNpulsa. En la medida que se cierren las brechas que alejan la posibilidad de hacer sostenible un emprendimiento y se abren nuevas oportunidades para avanzar en la consolidación y formalización de estos, se posibilita el crecimiento económico de las unidades productivas con mayor potencial productivo y comercial.

La oferta de Prosperidad Social se ubica específicamente en dos ejes:

1. Generación de ingresos, emprendimiento y formalización, con programas como Mi Negocio, Familias en su Tierra e IRACA, que apoyan unidades productivas de población vulnerable y emprendimientos con potencial de crecimiento.
2. Desarrollo Productivo, asociatividad y acceso a mercados, en el que se encuentra el programa Emprendimiento Colectivo, dirigido a personas vulnerables que han tomado la decisión de asociarse para hacer realidad su empresa. A partir de este programa se busca crear condiciones para el fortalecimiento de las organizaciones productivas colectivas, mediante un proceso de formación, capitalización y acompañamiento.

La participación en estos programas no impide que las personas u organizaciones puedan beneficiarse de acciones de otras entidades, como recibir apoyo en financiamiento, contribuir a su entorno competitivo o innovación y tecnología.

La entidad también diseñó las iniciativas Tiendas para la Gente y Manos que Alimentan, enmarcadas en Economía para la Gente. Aportan desde el montaje de unidades para la producción de alimentos para el autoconsumo y generación de excedentes comercializables hasta la reactivación económica de las tiendas de barrio. Esto es muestra del compromiso del Gobierno Nacional, del sector privado y cooperantes con la población más vulnerable. Unidos, apoyando la reactivación económica, podemos hacer de Colombia un país más equitativo, con mejores y mayores oportunidades para todos.